Hoy, 8 de diciembre, se cumplen 40 años de que John Lennon fuera asesinado a las puertas de su domicilio, por aquel entonces, en Nueva York. Son por todos bien conocidos los detalles y cómo este hecho paró el mundo de incredulidad por un momento.
Hoy queremos traeros una anécdota también protagonizada por John Lennon, bastantes años antes, en 1966, que quizá no es tan conocida, y que supuso el final de los conciertos de los Beatles.
El periódico inglés London Evening Standard entrevistó en marzo de 1966 a los Beatles bajo el titular «¿Cómo viven los Beatles? John Lennon lo hace así».
Se trataba de una serie de entrevistas en las que en cada edición se preguntaba a uno de los componentes de la banda de Liverpool sobre pensamientos, emociones, sus rutinas, anhelos y sueños, etc.
Entre estas declaraciones, en un momento dado, John responde: «El Cristianismo se irá. Desaparecerá y se encogerá. No necesito discutir sobre eso, tengo razón y voy a tener razón. Nosotros ahora somos más populares que Jesús, no sé qué se irá primero, si el rock and roll o el Cristianismo.» La frase pasó desapercibida en marzo, nadie en Inglaterra vio en esta cita ninguna repercusión.
Fue pasados unos meses, en EE.UU. cuando resurge la cita de Lennon y emerge la consecuente polémica derivada de descontextualizar la entrevista del London Evening Standard: Datebook, una revista adolescente americana publica el jugoso titular en su edición del 29 de julio de 1966.
Tras publicar en agosto de 1966 su disco Revolver, cuando iniciaban su gira por EE.UU. para presentarlo, el titular de Datebook descontextualizado había llegado a oídos de toda la sociedad americana y enfurecido a algunos colectivos ultra-religiosos como el Ku Kux Klan.
En los días posteriores se organizaron quedadas para protestar y quemar vinilos de los Beatles en señal de rechazo a las declaraciones de John Lennon. La emisora KLUE (Texas) hacía este llamamiento: «Invitamos a los adolescentes de la zona a traer sus discos y otros símbolos de popularidad del grupo para ser quemados en una hoguera publica, el viernes 13 de agosto por la noche.»
Los incidentes se agravaron hasta el punto de que el concierto del 29 de agosto de 1966 en Clandlestick Park, San Francisco fue el último por el que un público pudo pagar por ver a los Beatles en directo. Entre el público, miembros del Ku Kux Klan al grito de «Beatles, go home!» hicieron explotar varios petardos, simulando disparos.
Dados los acontecimientos y cómo esto estaba poniendo en peligro la continuidad de la carrera del grupo, el manager del grupo obligó a John Lennon a convocar una rueda de prensa para retractarse:
Harrison se planteó por un tiempo abandonar la banda, pero fue convencido de continuar con la condición de que los Beatles trabajaran como banda de estudio a partir de entonces, sin conciertos.
Entonces comenzaron a trabajar en el álbum Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band, en junio de 1967. Se le sucedieron las grabaciones de los álbumes: The Beatles (White Album, vamos, en 1967), Abbey Road (1968) y Let it Be (1970).
Fue durante la grabación de este último, en 1969, cuando, los de Liverpool, sí que dieron un último concierto. El épico y final concierto de los Beatles en la azotea de Apple Corps, el estudio de grabación de los Beatles en Londres.
Tuvo lugar el 30 de enero de 1969. Fue una actuación improvisada, no un concierto al uso, no se vendieron entradas y solo pudo ser disfrutado por los viandantes de Londres. Se hicieron algunas grabaciones que hoy podemos encontrar en YouTube:
Desde ese día los vinilos de los Beatles son una auténtica pieza de coleccionista. Es muy raro encontrar vinilos antiguos a la venta (incluso entre particulares, de segunda mano). Siempre que encontramos alguna reedición curiosa intentamos traerla en nuestra tienda de discos, ¡pero vuelan!